«REZO DÍA Y NOCHE POR QUE ESTÉIS BIEN»
Podemos atisbar el corazón de un soldado de la legión romana. Mientras Virgilio muere en Bríndisi, el poeta Antonio Colinas hacía escribir al moribundo legionario romano de su poema: «No quiero que me entierren bajo un cielo de lodo, /que estas sierras tan hoscas calcinen mi memoria. / Oh dioses, cómo odio la guerra mientras siento / gotear en la nieve mi sangre enamorada». Ahora, un suceso real, acontecido hace más de 1.800 años a un soldado romano, viene a ilustrar los sentimientos de aquellos reclutas que combatían a miles de kilómetros de su tierra natal con sus propias palabras. … Sigue leyendo →